Como sabéis si soléis pasaros por EOHC nos encanta el mundillo de los clásicos y solemos tratar de acercarnos a todos los eventos y concentraciones que nos sean posibles y esta vez tocó el Concurso Internacional de Elegancia de Madrid.
Un evento de este tipo consiste en evaluar a los vehículos participantes en función de su estado de conservación, si ha sido restaurado que totalmente fiel a cómo salió de fábrica en su día y en muchas ocasiones en estos concursos aparecen auténticas joyas de la automoción. Los concursos de elegancia más famosos son el de Pebble Beach y el de Villa d´Este y se convierten en auténticas fiestas en las que pueden aparecer vehículos únicos, además las propias marcas suelen aprovechar para llevar algún prototipo o superdeportivo.
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En Madrid también se quiso tener un concurso de elegancia, que aunque no llegue al nivel de las grandes citas internacionales pudiera mostrar algunas de las unidades de vehículos históricos mejor conservadas del país. El lugar elegido fue el Palacio Real de Madrid, sin duda una buena elección para realizar este tipo de acto, y de esta forma ya llevamos seis ediciones en las que además de los coches participantes se realizan reuniones de clásicos para completar el evento.
Este año las cosas pintaban mal desde antes de la celebración, toda la semana con previsión de lluvia hacía pensar que no iba a haber demasiada asistencia, además el día de antes se decidió cambiar la localización debido a que una manifestación pretendía llegar al Palacio Real y lógicamente destrozaría un evento de éste tipo. A pesar de estar a favor de que cada uno manifieste la opinión que crea conveniente pienso que el derecho a la libertad de expresión de uno acaba donde empieza la de otro, pero en fin hubo que mudarse.
El nuevo emplazamiento fue la plaza de Felipe II, un lugar mucho menos apropiado para estos menesteres y la lluvia quiso estar presente de manera contundente, con todo esto el panorama no era muy halagüeño pero aun así decidimos asistir para tratar de disfrutar de los clásicos. Al llegar los malos presagios se hicieron realidad, no había demasiados coches y las vallas impedían que el público se acercara a los coches, entiendo que algunos vehículos son joyas y se pretenden preservar pero según estaban colocados era imposible poder ver muchos de ellos de cerca o hacerles fotos, afortunadamente nosotros pudimos pasar y disfrutar de los coches de cerca pero no nos parece de recibo alejar a la gente de esta forma.
Entre los vehículos asistentes no todo eran elegantes históricos, nos sorprendió encontrarnos con algún clásico popular como Renault 4/4, SEAT 800 o Mini en un estado envidiable, pero que no esperas encontrar en un evento así. Aunque hubo pocos coches y algunos personalmente no creo que fueran dignos de un concurso de elegancia, para hacer honor a la verdad hay que reconocer que también hubo unas cuantas joyas dignas de admirar.
El jurado otorga premios a diferentes categorías y un premio al mejor vehículo de la cita, este recayó en un tremendo Mercedes Simplex de 1902 propiedad de la Fundación RACE, que desgraciadamente no pudimos admirar demasiado bien ya que estaba cubierto por una lona para protegerse de la lluvia. Además pudimos disfrutar de algunos preciosos históricos como Rolls Royce Silver Ghost, Berliet Normandie, Jsguar SS100, Oldsmobile Futuramic, Cadillac Cabriolet, Dodge Polara, varios modelos de Packard o un pequeño Peugeot Bebe de 1914 con su matricula original de Valladolid, ¡todo un lujo!
Esperamos que en proximas ediciones el evento mejore, se promocione más y vuelva a un lugar acorde a la elegancia de la que se quiere hacer gala. Sin más os dejamos una completa galería de fotos con practicamente todos los asistentes al Concurso de Elegancia.
Un evento de este tipo consiste en evaluar a los vehículos participantes en función de su estado de conservación, si ha sido restaurado que totalmente fiel a cómo salió de fábrica en su día y en muchas ocasiones en estos concursos aparecen auténticas joyas de la automoción. Los concursos de elegancia más famosos son el de Pebble Beach y el de Villa d´Este y se convierten en auténticas fiestas en las que pueden aparecer vehículos únicos, además las propias marcas suelen aprovechar para llevar algún prototipo o superdeportivo.
En Madrid también se quiso tener un concurso de elegancia, que aunque no llegue al nivel de las grandes citas internacionales pudiera mostrar algunas de las unidades de vehículos históricos mejor conservadas del país. El lugar elegido fue el Palacio Real de Madrid, sin duda una buena elección para realizar este tipo de acto, y de esta forma ya llevamos seis ediciones en las que además de los coches participantes se realizan reuniones de clásicos para completar el evento.
Este año las cosas pintaban mal desde antes de la celebración, toda la semana con previsión de lluvia hacía pensar que no iba a haber demasiada asistencia, además el día de antes se decidió cambiar la localización debido a que una manifestación pretendía llegar al Palacio Real y lógicamente destrozaría un evento de éste tipo. A pesar de estar a favor de que cada uno manifieste la opinión que crea conveniente pienso que el derecho a la libertad de expresión de uno acaba donde empieza la de otro, pero en fin hubo que mudarse.
El nuevo emplazamiento fue la plaza de Felipe II, un lugar mucho menos apropiado para estos menesteres y la lluvia quiso estar presente de manera contundente, con todo esto el panorama no era muy halagüeño pero aun así decidimos asistir para tratar de disfrutar de los clásicos. Al llegar los malos presagios se hicieron realidad, no había demasiados coches y las vallas impedían que el público se acercara a los coches, entiendo que algunos vehículos son joyas y se pretenden preservar pero según estaban colocados era imposible poder ver muchos de ellos de cerca o hacerles fotos, afortunadamente nosotros pudimos pasar y disfrutar de los coches de cerca pero no nos parece de recibo alejar a la gente de esta forma.
Entre los vehículos asistentes no todo eran elegantes históricos, nos sorprendió encontrarnos con algún clásico popular como Renault 4/4, SEAT 800 o Mini en un estado envidiable, pero que no esperas encontrar en un evento así. Aunque hubo pocos coches y algunos personalmente no creo que fueran dignos de un concurso de elegancia, para hacer honor a la verdad hay que reconocer que también hubo unas cuantas joyas dignas de admirar.
El jurado otorga premios a diferentes categorías y un premio al mejor vehículo de la cita, este recayó en un tremendo Mercedes Simplex de 1902 propiedad de la Fundación RACE, que desgraciadamente no pudimos admirar demasiado bien ya que estaba cubierto por una lona para protegerse de la lluvia. Además pudimos disfrutar de algunos preciosos históricos como Rolls Royce Silver Ghost, Berliet Normandie, Jsguar SS100, Oldsmobile Futuramic, Cadillac Cabriolet, Dodge Polara, varios modelos de Packard o un pequeño Peugeot Bebe de 1914 con su matricula original de Valladolid, ¡todo un lujo!
Esperamos que en proximas ediciones el evento mejore, se promocione más y vuelva a un lugar acorde a la elegancia de la que se quiere hacer gala. Sin más os dejamos una completa galería de fotos con practicamente todos los asistentes al Concurso de Elegancia.
Concurso de Elegancia de Madrid 2013
En EOHC | ClassicAuto 2013: los coches clásicos inundan Ifema. | Jarama Vintage 2013: El pasado se hace presente.
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